José Ramírez, pastor de una iglesia cristiana en Santa Rosa de Cabal, fue detenido en Chinchiná, Caldas, luego de ser acusado de abusar sexualmente de su hijastra de 13 años. La menor, tras escapar del lugar donde había sido retenida y abusada, logró alertar a la comunidad gritando “me violó, me violó” mientras aún estaba atada y con una cinta en el cuello. Fue socorrida por un vecino, quien la llevó al hospital para recibir atención médica.

Durante las investigaciones, las autoridades encontraron un hueco de aproximadamente tres metros de profundidad, con una tina azul del tamaño de una persona, lo que sugiere que el acusado tenía la intención de enterrar a la menor después del abuso. La Policía, en conjunto con la comunidad, logró capturar a Ramírez, pero antes de ser trasladado a un hospital debido a las lesiones sufridas, fue linchado por los vecinos enfurecidos.
Las autoridades están llevando a cabo una investigación para determinar la magnitud del crimen y la responsabilidad del acusado, mientras que la menor se encuentra recibiendo atención médica y psicológica tras el trauma sufrido.

